martes, 10 de mayo de 2011

Cómo enfrentar la pérdida de un trabajo.

La pérdida de un trabajo es una de las crisis más difíciles de enfrentar. El desempleo, el divorcio y la muerte de un ser querido se consideran los eventos más estresantes y debilitantes que una persona puede experimentar. Aunque el tema financiero es un asunto serio, el golpe al ego es muy difícil de enfrentar. Las pérdidas incluyen:

•Pérdida de la auto-estima
•Pérdida de la rutina diaria
•Pérdida de una actividad objetiva
•Pérdida de ingresos
•Pérdida de seguridad
•Buscar apoyo y ayuda

No es raro que la persona se deprima después de perder un empleo. La depresión es temporaria si se ocupa y toma el control de su vida. No dude en compartir lo que le ha sucedido con sus conocidos y pida consejos para reubicarse.

De rienda suelta al enojo y al resentimiento
El dar rienda suelta al enojo y resentimiento es esencial para resolver toda crisis personal. Las formas saludables de enfrentar la frustración pueden ser, entre otras, la gimnasia muy activa, el ejercicio físico, el encarar tareas largamente postergadas en el hogar (como pintar, remodelar, decorar), etc. Para sentirse realizada, es bueno tener en cuenta que correr, nadar, limpiar el jardín, estar con niños, pintar y juntarse con amigas son opciones muy válidas.

Evaluación
El shock inicial de una pérdida de trabajo, puede cegarnos momentáneamente y tendremos tendencia a ver solamente las partes negativas de la situación.

Aunque su último trabajo era una importante fuente de auto estima y de ingresos, no puede haber sido lo único y más importante de la vida. Trate de pensar en otros aspectos gratos de su vida que sean realmente valiosos. Este es el momento de evaluar nuevamente sus fortalezas, debilidades e intereses para poder generar la confianza y el optimismo necesarios para comenzar otra vez.  Esto puede resultar en un importante punto de inflexión para realizar cambios positivos.

Impacto sobre la familia
Para un niño, la pérdida de trabajo de uno de sus padres, representa un cambio significativo en su mundo. Los chicos, como los adultos, atraviesan un breve proceso de dolor. Los niños son perceptivos. Generalmente no sirve tratar de ocultarles esta información. Si no sabe la razón de la tristeza del adulto, el niño puede llegar sentirse responsable de la tristeza o el enojo. Es importante para todo la familia charlar juntos y ayudarse unos a otros cuando uno de los padres está entre trabajos. Los niños suelen ser comprensivos y colaboradores cuando saben que no tienen la culpa .

Estrategias para sobrellevar la situación
En primer lugar, asesorarse sobre los temas a los que se podría tener derecho, como el cobro de la indemnización y otros beneficios que puedan corresponder: un servicio de outplacement o de reubicación laboral, el uso de una oficina y teléfono durante la búsqueda de trabajo, el seguro de desempleo, y el mantenimiento de la obra social durante unos meses (que varían de empresa a empresa). Ante cualquier duda, consultar con un abogado laboral.

También es importante solicitar a la empresa el certificado de servicios donde detallan todos los aportes efectuados a efectos jubilatorios y una carta de referencia en el membrete de la empresa para utilizar en la búsqueda de trabajo.

Encare la búsqueda de trabajo, dedicándole por lo menos cuatro horas diarias – elabore un buen cv, utilice el teléfono para llamar a sus contactos personales y profesionales haciendo el approach indirecto: "Sé que no tienes un puesto para mí en tu empresa, pero te mando igualmente mi cv para que me tengas en cuenta. Se te ocurre a quién más puedo llamar para averiguar si están buscando una persona de mis características?". Contacte a todos los conocidos que puedan darle una mano en la búsqueda.

No descarte nada: ni los avisos de los diarios, ni los sitios laborales de internet, ni las presentaciones espontáneas. Si la búsqueda promete ser larga, dedíquele un tiempo a pensar qué actividad independiente podría encarar hasta que salga el trabajo ideal para asegurar un mínimo nivel de ingresos.

Encare algún trabajo solidario por lo menos una vez por semana. Mímese un poco – aliméntese bien, haga ejercicio, diviértase, descanse lo suficiente y concéntrese en las posibilidades y logros antes que en los fracasos.


Fuente: www.careerwoman.com

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